sábado, 19 de junio de 2010

Fatiga de la duda,
decisiones que me desbaratan
la vida,
pero indecisiones me arruinan
el riesgo.

Obstáculos. Miedos de niño
que se enroscan en mi estómago
como animalitos hambrientos.
Promesas que se truncan
en fracasos dilapidarios y
abren la herida a la lija.

Siento no ser más concreta.
Es una ternura donde se
sobrevive la inseguridad
del viento.
Un apego como espuma
arrimado a las incertezas
de esta vida.









María de Nicoletta Tomás

jueves, 10 de junio de 2010

HAPPINESS
Hoy me pierdo por las calles de chinatown, buscando imágenes exóticas con el objetivo de mi cámara, cotejando los precios en sus mercados con los precios en los de mi pequeño México. Perdida. Sin embargo, nunca te acostumbras a despedirte definitivamente de un lugar así.
La primera impresión no cuenta porque no es suficiente en esta metrópolis de gente venida de todo el mundo. Una opinión formada se trans-forma con la experiencia. Hay un verbo en inglés para decir esto: undergo... Yo soy otra cambiante que no para quieta, este mi yo inestable siempre en proceso. Como se lee en la puerta del Bowery Poetry Club, "everything is subject to change", y en todos lados se puede cambiar, no es necesario seguir los pasos del poeta que te arañó noches de lutos. Pero cuando existes en otra realidad e intentas naturalizarla, entonces el cambio se intensifica porque vives muy despierta.
Ahora habito por Brooklyn y conozco cada semana nuevos artists con los que practico mi inglés de manual (Grammar in use). La necesidad de hablar este lenguaje maximiza su presencia, se ha ido instalando en mí y ahora ya puedo decir que pienso en inglés. Aprender una lengua es como desdoblarse y mirarse desdoblándose. Quiero decir que New York me ha colocado en un lugar nuevo e incómodo en el que no entiendo nada, me rodeo de gente que no puede arroparme con lo esencial, la lengua. Y yo desde la extrañeza y la estupefacción me desdoblo en un diálogo cómplice conmigo misma. Hasta que me agoto y desconecto.
Prefiero no compartir esto con otros españolitos criticones, aunque yo también juzgo a los newyorkers. Pero ¿por qué será que los españoles vemos trendy detestar a los americanos con sus películas edulcoradas y su capitalismo colonialista extendido por everywhere? Esto debe desvelar un sentimiento de inferioridad. Hablamos de ellos desde la posición del que copia una conducta para luego criticarla sin dejar de reproducirla.
También hay momentos que daría algo por poder compartirlos. Como cuando me siento en los pies del puente de Brooklyn mientras veo desaparecer el sol entre los rascacielos. Y diviso las luces que se encienden en el puente primero y luego las que se van encendiendo lentamente en algunas ventanas de la ciudad. Algo mágico sucede cuando me concentro en estos silencios empachados de emoción. La noche newyorker me ha enamorado.
Algún día tendré que parar quieta en algún lugar para compartir esta happiness que se ha vuelto cotidiana.

sábado, 13 de marzo de 2010

IV.

Penélope cansada de ser referencia
descansa la cabeza en mi falda,
“mi mundo es pequeño” y ella asiente.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Ya he encontrado la cita con la que empezaré el viernes. Es de Leopoldo María Panero, de su Aviso a los civilizados.


“Somos diferentes, sí, somos diferentes. Somos realmente diferentes, radicalmente diferentes, felizmente diferentes. Fundemos pues, sobre las ruinas de aquel hormiguero, nuestra propia sociedad. Reemplacemos el hospital por una extraña comuna. No alguna comuna pacífica o bucólica, que se conforme con estar simplemente al margen, sino por una comuna activa, cotidianamente subversiva, más que revolucionaria. (…) ahora veremos quien era el perseguidor y quien el perseguido. Porque os perseguiremos con la misma saña con que vosotros lo hicisteis, aprovechándonos del laberinto de vuestras apariencias, instalados traidoramente entre vosotros sin que sepáis nunca cual de las marionetas que por allá deambulan mueve ella misma la cuerda. Vosotros que nos educasteis en el terror a la soledad y a la exclusión, sabréis ahora del terror de no estar, nunca jamás, solos.”




La naturaleza, el hombre y la cultura José Renau Berenguer (Fuente: www.loquesomos.org)

martes, 12 de enero de 2010

Todo por una llamada inesperada. Una que estudió 1º de BUP conmigo (qué estudias? Bup bup bup) (burros unidos para estudiar). No ha dejado de repetirme que le ha ido mal. Tiene razón. Que su mejor etapa de la vida fue aquella. Que a mi me ha ido muy bien… no sabe nada de mí, pero a juzgar por las miserias que me ha contado de su vida (la droga eh muh mala), la mía podría ir peor.


Todo por una llamada inesperada. Ubi sunt sin muchas ganas. ¿Cómo éramos a los 14 años? Insensatas. Cada día como si fuera el último. Aturdidas. Todo un mundo para experimentar. Vehementes. Amores lapidarios. Irrefrenables. Pasarlo bien en imperativo. Efusivas. Mis amigas = mi única familia. ¡Sobre todo grunge!


Y aquella smells like teen spirit… Si la escucho ahora: ¡lloro! Venimos al mundo en plena generación X. A los 14 admiramos el misterioso suicidio de nuestro ídolo. Jugábamos a ver quien era más extravagante dentro de la aparatosa indiferencia por TODO. El comunismo ya no entraba en nuestros planes.


Y ahora… Generación X en España


Así me va, así nos va



viernes, 8 de enero de 2010

Causas de efectos insignificantes...

Porque pasas algunas tardes aburrida del aburrimiento mirando en la pantalla poemas de otras, porque no te atreves a escribir los tuyos, porque temes a la página word que se te enfrenta, y porque ya pasaron los tiempos de lo extremo y ya empiezas a creértelo. Porque él varia demasiado y aceptaste aquella etiqueta de "mujer que espera", porque quieres vivir en los altibajos, porque la calma no te incita porque no te inquieta. Porque aún fumas para dogmatizar tu pasado excesivo, porque una vez fuiste espontánea (espontaneidad: gran sueño: paraíso, poder, goce) y exclusiva.




Nostalgias de lo que no pudo ser...
pero también, y, por qué no, de las voces primeras

Hace meses que no me tiro por el balcón
ni me corto las venas,
pero hace tiempo también que no leo una página
que me persiga en sueños,
ni escucho una voz, tu voz,
aunque tú varíes
y me estremezcas desde otros cuerpos que no son ya el tuyo.
Hace tiempo que las lágrimas -¿por fin?-
parecen haberse serenado.
La máquina está satisfecha.
(todo esfuerzo ha redundado en beneficios)
Pero las orquídeas ya no más
son el cruce de la flor y la serpiente
y el alma se aburre;
acostumbrada como estaba a los infiernos,
tras un breve descanso
¿ya no es posible el retorno?

Si se han apagado las brasas...
da terror pensarlo sólo.
Me asusta un saltamontes en mi sueño,
erguido en las cenizas, frotando su silueta al infinito
(en una tarde tan en calma)

De Brenda Ascoz

lunes, 4 de enero de 2010

Deseé alguna vez que un poeta me amase...

Deseé alguna vez que un poeta me amase

Ahora duelen sus poemas en mi cuerpo‚
algo de mí que en él se reconoce hasta quebrar la imagen
de todo lo que fui.
Ahora deseo que me amase tanto que dejara de amarme
y sus palabras fuesen nieve
que el sol de junio fundiese entre mis pechos‚
allí donde su aliento insiste en acallar
esta tristeza antigua que siempre me acompaña.

De "Semillas para un cuerpo"
Chantal Maillard


LÍMITES LENGUAJE MACHISMO PURO Y DURO


En un mismo día he dado con dos tipos que ejercen la violencia simbólica del lenguaje. Un lenguaje históricamente aceptado y visto como natural para algunos.

Uno que dice querer ir de fiesta conmigo, "vámonos de fiesta pues" Pero se enfada cuando repara en que no hay nada que hacer con la femme fatal esa, la poco recatada. Y para insultarme únicamente tiene que echar mano de la lógica patriarcal legitimada. Me llama calientapollas y queda impune.


Sigo expuesta al mismo insulto que reconozco desde pequeña, el lenguaje sigue operando como legitimador de la desigualdad y la violencia, se repite el viejo modelo.


Para que no me insulten tengo que encerrarme en la cocina, es decir, no tener influjo en la vida social . Sino voy directa al prostíbulo, lugar históricamente reservado a la mujer pública. Porque en su imaginario sólo hay dos categorías posibles: la puta o la decente, la del burdel o la de los fogones.


Esto está ahí, es cotidiano. Los cambios culturales tienen que darse en el orden simbólico para que se produzca un cambio real. Para que no se insulte y no se violente sexualmente a niñas, jóvenes, mujeres… trascendamos los límites del lenguaje.



martes, 22 de diciembre de 2009

CENTRO COMERCIAL

Tengo que, tengo que, tengo que, tengo que, pero es que tengo que

Tengo que comprar regalos de navidad, por eso voy a un laberinto de tiendas y por un momento me creo la ilusión de la normalidad, incluso creo que tengo que comprarme unos botines de tacón. Pero dura poco, al rato estoy desconcertada porque la gente parece feliz en un centro comercial. Porque asisto a un concentrado de objetos de deseo que no sacian nunca nuestra sed. Voy al Alcampo para comprar queso, me pierdo, hay tanta comida envuelta en plásticos que ya no sé quién soy y qué hago en este lugar siniestro.

Pero tengo que, tengo que…

Presencié un cagatió en la talaia. La condición era que los regalos no fueran comprados, el resultado: regalos más personales, afectivos, divertidos y originales. Yo exploraba las reacciones de la gente con sus regalos, parecía un tipo de vuelta a la niñez. Mi madre siempre me cuenta que su única muñeca de la infancia se la hizo su padre con trapitos. Cuando intenta expresar la emoción que le produjo aquel regalo, no le salen palabras.

Tengo que esforzarme por resignificar lo aprendido, porque comprar regalos con dinero no es apasionante. Andar perdidos por centros comerciales buscando siempre algo que es reemplazable, no es normal. Querer llevar tacón para parecer más elegante, más a la moda, más alta, más guapa, etc., no es digno.



martes, 24 de noviembre de 2009













Sci-Fi

Equilibrium es un pastiche pero viéndola me he acordado de algunas historias de Sci-Fi que me han marcado. En Equilibrium la sociedad después de la 3ª guerra mundial decide drogarse para dejar de sentir. Es inquietante la desconfianza que tienen unos de otros cuando se preguntan ¿Can you feel? Y es conmovedor ver a christian bale sintiendo por primera vez cuando deja el prozium –me hipnotizan estas palabrejas-. Bale deja la droga pacificadora de las emociones y llora al ver el amanecer en tetragrammaton, al oír una de beethoven y al acariciar la mano de emily watson.


A los raritos como yo les sonará la historia de Equilibrium, es la misma que en Fahrenheit 451, Mátrix, Un mundo feliz, Blade Runner, 1984, Fantastic Planet... Las sociedades de comodidad absoluta gracias a prótesis imaginables, prohíben la afectividad, la empatía, el arte, para vigilar a la sociedad en tiranías deshumanizadas.


Me sería muy difícil escoger una de estas historias futuristas como mi preferida: Recuerdo que Mad Max me desconcertó por su estética de raves. No escuchamos nuestras alteraciones íntimas, únicamente creemos como verdadero lo que se puede decir con el lenguaje que no es nuestro, como en 1984. En Un mundo Feliz el sexo naturalizado mata el desasosiego que causa la pasión amorosa. Y pensándolo bien… ¿quién quiere sexo sin amor? Los replicantes de Blade Runner también sueñan, y qué elegirías tú si fueras Keanu: Ignorancia y felicidad o conocimiento e infelicidad, Matrix o Sion? Fantastic Planetde un surrealista setentero que imaginaba Oms meditando y haciendo distracciones crueles con los humanos. Fahrenheit 451 es peli de clase de filosofía de instituto. ¡Terriblemente buena! La sociedad de control prohibe los libros, leer equivale a quebrantar la ley porque leer es peligroso, ya me lo imaginaba yo...


Sospecho que los comentarios fatalistas sobre un futuro apocalíptico velan un deseo morboso de que así sea. Además es fácil imaginar que lo peor está por llegar. Y lo peor quizás sea la sutileza (Sion) que sólo nos habilita para observar cínicamente espacios, relaciones, "juegos" sociales como construcciones históricas. Allí donde antes había verdad ahora hay invención, donde antes poesía ahora artefacto.